De Teleclub de La Rosa a Asociación Nuevo Surco.
El barrio de La Rosa está situado junto a Monte Breña en el límite norte del municipio de Villa de Mazo, lindando con Breña Baja. Limita por el Este con Monte Breña y Monte. Por el sur limita con El Poleal y El Pueblo. El lugar de La Rosa es poseedor de una amplia zona de monte muy aprovechada desde el punto de vista agrícola y ganadero. De hecho, el nombre del barrio proviene de la práctica de “rozar” las zarzas y el monte para crear zonas de pastoreo y para guardar pastos para la época estival, cuando el forraje verde escasea.
Los elementos naturales más destacados son la montaña de El Búcaro y la de Brejillos, situadas en la zona alta del barrio en la que está siempre presente el monteverde, que compite con el cultivo de frutales, hortalizas y forrajeras, entre las que destacan el cultivo de tagasastes y donde en el pasado estuvo muy extendido el cultivo de tabaco, que jugó un importante papel en la economía de este lugar.
El barrio está atravesado por varios senderos y caminos, algunos de ellos hoy convertidos en pistas. Los más conocidos son el Camino de La Faya, que forma parte de La Red Insular de Senderos, y el Camino de Brejillos, ambos con una disposición vertical, para su uso en el aprovechamiento de los recursos de montaña que posee y el GR-130 o camino Real que rodea toda la Isla, que aún dispone de varios tramos que no han sido modificados y en los que se puede apreciar el empedrado del suelo y las paredes de piedra seca que lo bordean. Junto a los caminos queda patente la existencia de un rico patrimonio arquitectónico tradicional, con muchos ejemplos de viviendas tradicionales.
En este incomparable entorno natural y con una población mayoritariamente dedicada a la ganadería y la agricultura surgió El Teleclub de La Rosa, que se constituyó oficialmente el 15 de febrero de 1971, por el impulso y las inquietudes culturales de un gran grupo de personas capaces de implementar esfuerzos y unirse para fraguar numerosas iniciativas encaminadas al fomento de su formación personal, social y cívica. Muchas actividades nacen o se organizan en torno a esta nueva institución, que comenzó a funcionar de manera provisional, en régimen de alquiler en la parte baja de la vivienda de D. Julio Leal Bravo, donde estuvo mucho tiempo la molina de “los Potecos”, siendo el primer presidente e impulsor Teófilo Barrera Rodríguez. A Teófilo le acompañaban en la directiva (nombrada el 7 de marzo del año 1971) como monitores: Cristóbal Barrera Tabares y María Remedios Henríquez Hernández, el secretario era Prudencio Domínguez Camacho y como vocal fue nombrado Roberto Martín Pérez. La figura destacada de esta organización era el Monitor, que era en esencia un Animador Cultural, cuya misión era la de coordinar las actividades y los esfuerzos del Teleclub para realizar los planes de acción cultural y formativa que su Junta Directiva y la que la Red Nacional acordasen; entre sus cometidos tenían la función de dirigir, como animadores, las actividades culturales del centro, así como la promoción de todo tipo de iniciativas que estimulase la vida local en los ámbitos social y comunitario.
Queda así constituido el Teleclub de La Rosa con el nº 1702, de los casi seis mil que se repartieron por todo el territorio nacional y comienza su andadura en este local provisional donde estuvo la molina de gofio. Allí se disponía de un espacio donde los mayores practicaban distintos juegos de mesa, principalmente la baraja y el dominó. En otra sala, en un lugar destacado, estaba el televisor, que recibieron del Ministerio de Información y Turismo del Gobierno Central de aquella época, a través del cual tenían acceso a programas de entretenimiento y a noticias de lo que sucedía en el mundo, permitiendo conectar a esta comunidad eminentemente rural con el resto de la sociedad. No en vano, uno de los principales objetivos de los teleclubes españoles era el de organizar fundamentalmente en torno a los espectáculos televisados actividades educativas y culturales diversas, tales como la lectura comentada de libros y revistas, la contemplación de documentales, la audición de discos de música selecta, las charlas de divulgación cultural seguidas de coloquios, las excursiones y el fomento del teatro de aficionados.
La iniciativa tiene éxito y tanto mayores como jóvenes encauzan sus inquietudes a través de este centro y, casi desde sus inicios, comenzaron a realizar actividades que les permitieran recaudar fondos para la construcción de un local más amplio y de su propiedad, que facilitara el desarrollo de las numerosas actividades que ya se estaban realizando. De este modo, a través de las entradas de las representaciones teatrales por distintos municipios de la isla, la venta de planta viva en maceta en la fiesta de Corpus, o la venta de arepas en los ventorrillos en la lonja de Antonio Tabares para la Fiesta de Coromoto y en la fiesta del Hoyo; también con la aportación económica de vecinos del lugar, emigrantes en Venezuela por aquella época, o el dinero extra conseguido con el préstamo del bar del Teleclub de Las Ledas en los bailes de Navidad, entre otras iniciativas, se hacen con una cantidad económica nada despreciable para tal fin.
En julio de 1972 Cristóbal Barrera Tabares, como presidente de la asociación, firma escritura de compraventa de un solar, de unos 280 metros cuadrados, situado muy cerca del local que estaban usando en alquiler, adquirido a Doña Fernanda Lorenzo Yanes, por el precio de cuarenta mil pesetas. Comienza ese mismo año la aventura de la construcción del nuevo local social, que se lleva a cabo con mano de obra de los propios socios y vecinos, contabilizada por la organización de manera escrupulosa. Domingo Acosta, periodista y poeta, redactor jefe del Diario de Avisos, nos relata en la prensa del año 1973, que “Allí, algunas tardes, casi todas las tardes, se reúnen hasta veinticinco personas y proporcionan su prestación personal. Algunas llegadas de otros municipios donde residen. Y para ejemplo de todos, don Benjamín, con sus noventa y cinco primaveras, de profesión albañil, que en su afán, hasta trepa a los andamios”. Se culminan las obras, de acuerdo a un proyecto técnico realizado gratuitamente por el arquitecto D. Félix Rodríguez de La Cruz, vecino del municipio, y se ejecuta a través de una empresa local de construcción en torno al año 1977-78, con la ayuda de una subvención del Ministerio de Cultura de 987.484 pesetas.
La actividad cultural generada en aquellos primeros años se puede ver reflejada en distintas iniciativas, principalmente llevadas a cabo por la gente joven, pero con un apoyo incondicional de los mayores que estimulaban y apreciaban el movimiento social que se estaba generando en el barrio y que les había hecho acreedores, dentro de la categoría de Premios Nacionales de Actividades Culturales, de la medalla de bronce y premio de 30.000 pesetas, que recibieron el año 1977 del Ministerio de Cultura.
De entre las muchas actividades realizadas citamos las siguientes:
-La creación de los grupos de teatro bajo el nombre de “La pandilla del Taller” con los más pequeños y el grupo “Ja, Ja”, con jóvenes del barrio que llevaron a escena varias obras que fueron representadas en la sede del Teleclub, pero también en otras localidades de la Isla. Son recordadas aún hoy “Quién me compra un lío” y “Cosas de Paco”, con muy buena acogida por parte del público y que han sido representadas de nuevo por grupos de teatro más actuales. Además se crearon de manera esporádica espectáculos teatrales con actores y actrices aficionados del barrio, como el cuadro artístico “Arecida” que en la década de los años setenta se creó para representar por todos los teleclubs de la isla obras como la titulada “La Educación de los Padres” del escritor D. José Fernández del Villar, para las que recibían alguna subvención del Ministerio de Información y Turismo como es el caso de ésta de diez mil pesetas, según consta en los archivos de la asociación en un documento del presidente José Roberto Martín solicitando permiso para poner en escena dicha obra teatral.
-Llamó mucho la atención la celebración en el Teleclub del centenario de Pilar Hernández Rodríguez, la más anciana de La Rosa en aquellos momentos, que llegó a vivir 103 años.
-La creación de comparsas de carnaval, con talleres en el Teleclub para confeccionar los disfraces y organizarse para recorrer luego toda la isla.
-La organización de excursiones por parte del numeroso colectivo de jóvenes de la zona, que utilizaban el Teleclub como centro de planificación. La consigna era: “¿Dónde vamos hoy?” Y a partir de ahí… podía surgir cualquier aventura, muchas veces para ir a disfrutar de la playa en el Varadero de La Bajita, otras para acudir a alguna fiesta improvisada, para hacer un recorrido en bicicleta o ir a El Pueblo para hacer deporte, entre otras.
-El uso del nuevo solar del Teleclub como campo de entrenamiento de lucha canaria de los jóvenes, incluso cuando ya estaban levantadas las paredes, pero sin terminar la obra, se aprovechaba el recinto para dicha práctica deportiva.
Con la llegada de la democracia y celebradas las elecciones generales de 1977, se crea el nuevo Ministerio de Cultura, que asume, entre otras, las competencias del antiguo Ministerio de Información y Turismo y, por tanto, todo lo referente a los teleclubs. En el año 1978 desaparece la Red Nacional de Teleclubs y muchos de ellos se transforman en asociaciones o centros culturales. El Teleclub de La Rosa se adapta a la nueva situación y tramita en el año 1979 para su registro a través de la Delegación del Gobierno de Santa Cruz de La Palma su nuevo nombre y sus estatutos y pasa a denominarse Centro Cultural Nuevo Surco, siendo en aquella época el presidente de la asociación Teófilo Barrera Tabares. Cambia la normativa, los estatutos, las personas en la directiva, pero no cambia el entusiasmo y las ganas de hacer las cosas, que se mantienen renovadas cada año para desarrollar proyectos de divulgación del patrimonio natural y cultural del barrio, el reconocimiento de valores personales de destacados miembros de la comunidad, la realización de excursiones dentro y fuera del municipio y otras actividades con un marcado carácter lúdico-recreativo.
El año 2010 un grupo de vecinos de La Rosa se reunió para reactivar la Asociación, para darle un nuevo impulso, enviando en enero del año 2011 los estatutos actualizados, manteniendo el espíritu de los iniciales, a la Viceconsejería de Administración Pública del Gobierno de Canarias. El 6 de mayo de 2011 reciben la comunicación de su inscripción en el Registro de Asociaciones de Canarias. Poco después se realiza una última modificación consistente en un aumento de vocales de la Junta Directiva, quedando definitivamente constituida el 17 de mayo del año 2012. De acuerdo con sus estatutos, los fines que persigue la Asociación son los siguientes:
-Organizar actividades diversas, tales como lectura comentada de libros y revistas, proyección de películas, documentales y diapositivas. Audición de música de calidad y demás actividades musicales. Conferencias y charlas de divulgación cultural, fomento del teatro, visitas a museos, protección del patrimonio artístico, organización de exposiciones y, en general, cuantas actividades culturales puedan desarrollarse.
-Promover actividades de carácter deportivo que fomenten no sólo la práctica competitiva, sino la práctica deportiva en general.
-Organizar actividades de recreo con todo tipo de juegos lúdicos.
-Organizar actividades de carácter social que fomenten las relaciones de convivencia de la comunidad.
Continúa la labor, el antiguo Teleclub sigue siendo el motor de la actividad del barrio, la vida cultural y social gira ahora en torno a Nuevo Surco; con renovadas ilusiones se trazan programas ambiciosos proyectos de actuación, ahora con mayor presencia en los medios haciendo que se visibilice mejor el esfuerzo que realizan. El 18 de enero de 2013 esta Asociación, a través de su presidente Miguel Ángel León Martín y previo acuerdo de su Asamblea, firma un convenio de colaboración con el ayuntamiento de Villa de Mazo, que contempla una cesión temporal de sus instalaciones, para la realización de actividades culturales y sociales. Por medio de este acuerdo el ayuntamiento, en contrapartida, sufraga los gastos necesarios para la reforma y rehabilitación del local social, dado el deterioro que ha sufrido con el paso del tiempo y las dificultades económicas de la Asociación para hacer frente a los mismos. Se rehace la instalación eléctrica, se impermeabiliza la cubierta, se renuevan maderas en puertas y ventanas, se pinta el local y queda a disposición de socios y vecinos para continuar esa importante labor que desde su creación han hecho en la localidad.
Algunos de los carteles anunciadores de las actividades que realizan:
En esta última década, Nuevo Surco ha realizado grandes esfuerzos por renovar y fortalecer el “espíritu del Teleclub” del que siempre se han sentido orgullosos en el barrio, generando numerosas y variadas actividades que congregan a un buen grupo de entusiastas, no sólo para los casi cien socios que posee, sino a cuantos han querido hacerse partícipes de estas iniciativas.
De esta vida sociocultural más reciente de la Asociación hacemos una síntesis que relacionamos a continuación:
-Creación de una biblioteca que tiene ya más de cuatro mil volúmenes, con bastantes libros y obras de teatro antiguos y manuales de consulta que han sido donados por particulares e instituciones, que es utilizada por muchos jóvenes y mayores del barrio.
-El local de la Asociación se utiliza para el desarrollo de actividades municipales como el de gimnasia de mantenimiento, que durante todo el año cuenta con la asistencia de un buen grupo de personas del barrio.
-Se celebran en esta Asociación algunas reuniones de carácter religioso, puesto que se usa el local como capilla provisional para la celebración de la santa misa y las reuniones de grupos parroquiales los días lunes y viernes de cada semana.
-En el seno de esta institución se ha creado el grupo musical de parranda denominado “Seis y Media”, que utiliza el local de la Asociación para sus ensayos y como lugar de encuentro social, realizando algunas actuaciones a lo largo del año en eventos tradicionales de la Asociación y que cuenta con una destacada proyección de su actividad musical por toda Canarias.
-La realización de variadas actividades que comenzaron bajo el lema “Conoce tu barrio” y luego conocidas como “Enamórate de tu barrio”, a través de las cuales la asociación ha pretendido, previa una investigación exhaustiva, dar a conocer tradiciones, historias, anécdotas, labores del pasado, personas destacadas del lugar… Contemplamos aquí la recreación de las antiguas bodas, publicitada como “El Bodorrio”. La difusión de antiguas historias o leyendas del lugar bajo el epígrafe de “El entierro del animal”, o “Por los caminos del burro”, también “El entierro de la cuerva”, El “Recorrido por los volcanes de Costa”, “En busca del canto del murciélago”, para conocer rincones como la cueva del Roque Niquiomo y la Cueva de La Canaria en La Sabina, “A coronar las cumbres de Villa de Mazo”, entre otras. Suelen ser rutas guiadas por los caminos del pueblo, comentadas por expertos que colaboran desinteresadamente con la Asociación, que siempre han sido bien acogidas y de amplia participación social.
-Son varios los homenajes realizados desde esta Asociación, en colaboración con el ayuntamiento de esta Villa, a personas destacadas, como son los celebrados a Caridad Salazar en la que fuera la casa natal de la poetisa en Monte Breña el año 2013, o el homenaje a D. Bernardo Gutiérrez, gran poeta y verseador de La Rosa, también el año 2013, el homenaje a verseadores y decimistas de Villa de Mazo el año 2016, con la colocación de un monumento en el casco urbano de Villa de Mazo y por último el dedicado a Arturo Yanes el año 2017.
-La realización de excursiones, como la tradicional visita al municipio de Puntagorda con motivo de la Fiesta del Almendro en Flor, o la celebración del Día de San Martín en la cueva de Jaime, en Barlovento, a la que acuden los caminantes después de seguir alguna ruta planificada para conocer el norte de la Isla. También contemplamos en este apartado la ya tradicional peregrinación anual al Santuario de Nuestra Señora de Las Nieves, en la que cada año se realiza algún acto distintivo, como la entrega de la rosa de madera para la Virgen con catorce pétalos de maderas diferentes de la isla en representación de los catorce municipios, en el año 2016. Al año siguiente se le entregó un bastón de peregrino, elaborado artesanalmente con madera de cedro de La Palma recogida en El Pico de La Nieve. En la visita del año 2018 al Real Santuario tuvo lugar la entrega de una bandera de la Virgen, pintada a mano, para la Casa de Romeros.
-Las celebraciones festivas en el local de la Asociación, como pueden ser, entre otras, el encuentro anual del aniversario de la constitución de la Asociación con la presentación de alguna novedad cada año, como fue el caso de un año con exposición de coches antiguos, que se concentró en la entrada de la sede de la Asociación; el tradicional encuentro de Navidad, con celebración religiosa, confección del Nacimiento e interpretaciones musicales de Los Divinos de Villa de Mazo; el almuerzo de solidaridad realizado en el año 2015 para recaudar fondos a favor de Cruz Roja.
-La realización de unas jornadas denominadas “Cumbre de estrellas” llevadas a cabo en los años 2014 y 2016 en la cumbre del municipio, con pernoctación en el Llano de La Mosca, con charlas y entretenidos talleres dirigidos por expertos de la talla de Antonio González y Antonio Juan Brito Leal, en los que numerosos jóvenes y mayores aprendieron técnicas de observación de estrellas, el manejo de las cocinas solares y uso de los relojes de sol. Como recuerdo de estas actividades se colocó un reloj de sol en la zona ajardinada de la calle Caridad Salazar, en el casco urbano de Villa de Mazo.
-El enrame del arco de Corpus, que todos los años se realiza en el barrio para participar en la Fiesta de Corpus Christi, la más emblemática de cuantas tiene el municipio, declarada de Interés Turístico Nacional el año 1985.
-Talleres para la enseñanza-aprendizaje de los enrames de los arcos de Corpus y las Cruces, a los que acuden personas del barrio y otras de diferentes lugares de la isla para colaborar y aprender estas labores artísticas.
-La realización de un taller práctico sobre el antiguo aprovechamiento de la raíz del helecho que, sobre todo en la época de la postguerra, se usaba como alimento. Este taller que contempló desde la recogida a mano y el transporte en animales de carga como se hacía en aquella época, su posterior limpieza y molienda a mano con molino de piedra, para terminar con la elaboración de los bollos de helecho. Algún tiempo después, esta experiencia se realizó también con los alumnos de las Escuelas Unitarias, dándoles a conocer vivencias que han quedado grabadas en la mente de muchas personas mayores de nuestro municipio.
-La participación de la Asociación en la Fiesta de Corpus Christi con aportación de exposiciones de autos antiguos, que comenzó con la exposición de los coches de dos personajes ilustres e hijos predilectos del municipio como fueron D. Alonso Pérez Díaz y el doctor D. Manuel Morales Pérez y que ha continuado con otras exposiciones de vehículos antiguos en distintas anualidades.
A lo largo de su ya dilatada historia las personas que han estado vinculadas, primero al llamado Teleclub y luego denominado Asociación Nuevo Surco de La Rosa, han dado muestras de su capacidad para la dinamización social, principalmente de los más jóvenes, de su inquietud por la promoción cultural de los vecinos y la defensa de una auténtica convivencia vecinal.
La Asociación Nuevo Surco supone hoy un referente imprescindible en el mundo sociocultural no sólo del barrio, sino del municipio y de la isla de La Palma, consiguiendo con su buen hacer fortalecer vínculos de amistad entre las personas y una participación social activa, por lo que ha sido galardonada por el Consejo Municipal de Cultura y el Ayuntamiento como Destacados del Municipio de Villa de Mazo en marzo del año 2019.
Podemos ver a continuación algunas de las fotos del acto de entrega de la distinción «Destacados del Municipio», celebrado en el Centro de Cultura Andares de Villa de Mazo, el 18 de marzo de 2019.
Debido a dificultades surgidas en los trámites de subvenciones ante algunas administraciones, en Asamblea General de la Asociación, de fecha 19 de diciembre de 2021, se procedió a la modificación de parte del artículo que hace referencia a la denominación de esta entidad, adoptándose la fórmula de «Asociación de Vecinos», por lo que a partir de entonces pasa a llamarse ASOCIACIÓN DE VECINOS NUEVO SURCO.